Como todos sabemos que Martin Luther King tenía un sueño, y a riesgo de que alguien pudiera pensar que se trata de una biografía de Selma Blair, el oportuno subtítulo en español nos transporta a Alabama en los años 60 y a uno de los puntos álgidos en la lucha por la igualdad de derechos para los afroamericanos en Estados Unidos. Sin duda un tema histórico bastante importante y una revisión a una figura capital que aspira a, una vez más, retomar el tema de la igualdad y su larguísima lucha durante los próximos Premios de la Academia.

selma2Ya no son 12 años esclavos, pero la cosa no va mucho mejor.

El retrato de Selma, Alabama, da la impresión de ser tanto un momento crítico como un eslabón más de una prolongada lucha que incluyó los más diversos aspectos de la vida diaria en un país que no había dejado de lado la segregación racial aunque sus leyes dijeran lo contrario. Una mujer solicita su registro como votante y lo ve denegado ante su incapacidad por nombrar a los más de 60 jueces estatales, tras un breve pero deliberadamente complicado registro. Su situación no es atípica en un momento en que el derecho al voto no era de libre acceso para todos los ciudadanos.

selma3La secuencia inicial de escenas nos da una idea del complejo momento en que nos encontramos: mientras Martin Luther King recibe el Premio Nobel de la Paz un grupo de niñas afroamericanas mueren en una explosión, en un ataque perpetrado por un grupo de supremacistas arios. Mientras el Presidente de los Estados Unidos recibe cordialmente a King, bajo la excusa de que prefiere a un activista como él antes que como Malcolm X, ciudadanos afrocamericanos son arrestados en Alabama por manifestarse en contra del trato desigual.

Más que ‘el poder de un sueño’, Selma es una expresión sumamente humana de una lucha. El retrato de un hombre atormentado también por sus propios miedos pero que sabe que ya no es posible dar marcha atrás, sin importar lo difícil que pueda parecer seguir avanzando. Las manifestaciones en Selma por el derecho libre al voto muestran todos los frentes de una lucha que sin duda implicó muchas más circunstancias, estados, oposiciones, privaciones legales y actos de violencia. Por un lado tenemos la imagen central de Martin Luther King, apropiadamente encarnado por David Oyelowo, quien pese a ser en gran medida el motor de toda la acción no se apropia por completo de la pantalla y deja espacio a todas las otras emociones y personajes involucrados. Además de su presencia política también nos adentramos en su vida personal, sus temores y su relación con su esposa. A partir de él vamos engranando la estructura política-social inmediata, en lo que refiere a su grupo de confianza, las otras organizaciones que buscaban lo mismo a través de otros medios, y su relación con la sociedad a la que buscaba dirigir y transmitir sus ideales de lucha. Y si esa visión de King consigue darle forma a la imagen del gran activista sin exaltarlo innecesariamente, la mayor fuerza de la trama está sin duda en la propia comunidad de Selma, en la imagen del grupo humano unido ante las injusticias, y las pequeñas historias fragmentarias que muestran las distintas formas de lucha cotidiana, y las distintas formas de enfrentarse a esa ira y ese dolor de no ser considerados por entero seres humanos.

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Oprah Winfrey, in the not-very-good old days.

Con una propuesta que en apariencia parece buscar un Oscar, «Selma» se aparta de lo más evidente de su propia historia para mostrar un entramado en donde se junta lo político con lo humano, la investigación policíaca (por llamar de alguna manera al acoso que sufrió King por parte del FBI) con la vida personal, y un gran abanico de personajes que aporten de manera fugaz su visión sobre todo lo que estaba sucediendo en los años 60 en Estados Unidos. Un mosaico que pese a su brevedad no pierde su fuerza y que consigue consagrarse hasta un par de devastadoras pero potentes secuencias.

selma5No deja de sorprender que una película tan bien lograda y que maneja un tema tan acorde con los que usualmente se premian, haya pasado tan desapercibida entre las nominaciones para el Óscar de este año. Quizás por su misma condición, en que no abusa de una sola figura ni termina por decantarse por finales hollywoodenses, se consideró no particularmente contendiente, o tal vez algo hubo de ‘ya premiamos suficientes temas afroamericanos el año pasado’. Sin contar la conmoción por producciones como «Birdman» o «Boyhood», haciendo que cuente con apenas dos nominaciones (a ‘Mejor Película’, que difícilmente ganará, y por ‘Canción Original’ en la que sí es una fuerte contendiente). Y extraña un poco que su directora, Ava DuVernay, no entrara en la categoría de dirección, con una pieza que visualmente (y musicalmente) es una maravilla, y sí lo hicieran Morten Tyldum («The imitation game») y Bennett Miller («Foxcatcher») que en mi apreciación se lucieron menos con sus producciones, especialmente Tyldum que en la dirección no tiene ningún mérito particular.

Por otro lado, seguro que con los casi 30 premios que la película ha cosechado en otros festivales, no lo necesita, y es sin duda un excelente ejemplo de cómo se puede compaginar un tema de interés con fines hollywoodescos y un excelente manejo de la trama y sus posibilidades audiovisuales. Y que la rola no deje de sonar en sus cabezas.

Y que la rola no deje de sonar en sus cabezas.

«Selma» es una coproducción del 2014 entre Estados Unidos y Reino Unido. Dirigida por Ava DuVernay («Middle of nowhere», «I will follow») y protagonizada por David Oyelowo («Interestellar», «Jack Reacher», «El último rey de Escocia»), Carmen Ejogo («The purge: Anarchy», «Away we go», «Pride and glory»), Tom Wilkinson («El exótico Hotel Marigold», «Batman begins», «Michael Clayton»), Oprah Winfrey («The Oprah Winfrey show», «El color púrpura», «Beloved»), André Holland («42», «Guerra de novias», «Black or white»), Tessa Thompson («When a stranger calls», «Dear white people», «For colored girls»), David Dwyer («The blind side», «October sky», «Remember the titans»), Henry G. Sanders («Rocky Balboa», «Whiplash», «Killer of sheep») y Tim Roth («Pulp fiction», «Reservoir dogs», «The incredible Hulk»). Tiene 7.7 estrellitas en imdb, 6.7 en filmaffinity y 98% en el tomatometro. Y es MUY recomendable.