Assassins Creed The lost history, Capitulo 1 | Forum

Prologo

Cuando estas al filo de la oscuridad tu mente se vuelve clara recuerdas lo que has vivido, las experiencias buenas y las malas, en mi opinión todas son una mierda, al final que te queda un remordimiento o una ansia de mas, a mi la segunda. Tengo 68 años, mis piernas son lentas, mi fuerza se ha ido y mi espirito… el todavía sigue allí, junto a mi hermandad, todavía recuerdo esas palabras que me motivaron a luchar, esas palabras que me regresaron el aliento, esas palabras que salieron del hombre, el amigo, el maestro. Cuando él se acerco a mí y me dijo “La liberación de Roma a comenzado” esas palabras me emocionaron y comencé a entender el mundo.

Honor, Familia, Hermandad son los motivos que conducían mi espada y ahora conducen la de mi hijo y tambien conducira al hijo de mi hijo y así sucesivamente, soy Augusto Fornari y soy un asesino.

Capitulo 1

Recuerdos de una infancia perdida.

Todavía recuerdo mi infancia cuando, fingía con mis amigos ser un caballero de la guardia luchar para defender Roma de los invasores y criminales, conquistar doncellas y tener aventuras, mis padres eran unos nobles, la familia Fornari los respetados mercaderes de Roma, también recuerdo cuando vi a esa familia del diablo, a ese hombre montado en su caballo, con el símbolo de un buey, esa familia eran los Borgia, maldita sea la hora que llegaron esos moustros, solo vinieron para destruir Roma y para matar a mi familia.

Mis padres se oponían a los Borgia y pagaron con su vida, recuerdo ese día mis hermanos habían regresado antes a casa yo me había quedado en la Iglesia, para pedir mmm… prosperidad a mi familia, que irónico, cuando volví a mi casa los vi muertos, todos ellos, mi padre, mi madre, mis hermanos, todos cubiertos de sangre, y sobre ella una silueta obscura, comencé a gritar como loco no sabia que hacer y de las sombras apareció Rodrigo Borgia y unos secuaces suyos, me miro y dijo “Esto es lo que pasa cuando te interpones a los Borgia” le grito a dos de sus secuaces que me atraparan, yo corrí como desesperado, tenía mucho temor no quería morir aun no, escale un edificio con la poca fuerza que tenia, ellos todavía me seguían, corrí entre los tejados intentando escapar, pero a pesar de eso ellos seguían persiguiéndome, estaba desesperado entonces llegue a un edificio que daba con el lago ellos ya metían, solo tenía dos opciones dejar que sus espadas me atravesaran o saltar al lago y esperar tener suerte… salte, cuando estaba cayendo sentía que podía volar como un aguila, caí al agua, estaba fría y turbia pero seguía vivo, aparente estar muerto, flotando en el agua con los ojos serrados, que bueno que esos dos eran unos tontos y lo creyeron.

Intente refugiarme con un Sacerdote amigo de la familia pero lo que vi me dejo sin palabras, cundo estaba entrado a la iglesia lo vi saludando y platicando con Rodrigo Borgia, ese maldito nos había traicionado, huy de ahí estaba solo en el mundo, el hambre me invadía no sabía qué hacer, entonces comencé a robar, al principio solo era comida, poco después comencé a robar dinero, en muchas ocasiones casi me matan, el dinero era para comprar comida años después era para emborracharme, apostar, olvidar… esos oscuros recuerdos sobre la muerte de mi familia, un día me entera de algo que despertó mi odio, el moustro, Rodrigo Borgia que había destruido mi vida se convirtió en hombre más poderoso de Italia.

Mi espirito y esperanza estaba rota, que debía hacer. Anterior mente había escuchado de un hombre que luchaba por el pueblo, lo llamaban el Asesino, decían que estaba en contra de hombres como los Borgia.

Un día el Papa había salido con uno de sus hombres, decidí matarlo no me importaba mi vida, ya solo quería mi venganza, que gracioso que después de años de temor solo por haber escuchado cuentos de un héroe ficticio, me había decidido a luchar, corrí hacia su caravana como un niño tonto, claro que fui interceptado por la guardia papal, comencé a agitar mi espada como loco, solo un hombre del papa con una estocada logro herirme en el brazo, otra vez, como cuando era niño comencé a huir pero ahora no solo eran dos hombres era casi un ejército, no tenia donde ir ya casi sentía las espadas de los guardias atravesándome, solo cerré los ojos esperando mi muerte, cuando solo escuche silencio.

CONTINUARA….

Este es una historia en la que e estado trabajando opiniones y sugerencias abajo.

Adios, Banda y aquien no le guste se puede ir a chingar a su madre.