Cicatrices (cuento continuacion) | Forum

Cicatrices

 

De antemano perdónanos… por no estar aquí…

 

Las cosas se han complicado bastante…  después de los primeros ataques, salimos confundidos de entre los escombros… yo con un brazo roto y ella sin ningún rasguño, no se por cuanto tiempo caminamos no vimos a nadie… entre nosotros solo si instauraba un silencio incomodo… como la última vez que la vi…

 

Eduardo le había contado todo lo de mi a Melisa me  sentí traicionado… tal vez… pero yo sabia perder, sabía perfectamente que solo era un segundo plato, el amigo que te hace sentir bien y nada más, mientras ellos se gustaban, lo sabía y era por eso que decidí alejarme, y por si te preguntas, si fue difícil y estúpido pero al final siempre mejor, ella me buscaba y se disculpaba, no entendía el motivo…

 

Hasta que Melisa me confesó lo que Eduardo le había dicho, no lo negué y se lo dije mirándola a los ojos, ella no dijo nada, no podía comprender que su amigo al cual había idealizado era yo, aquel que ya estaba harto y con el corazón en la mano, en ese momento comprendí que mi persona jamás seria correspondida por que si, ella le gustaba yo, mi concepto, el del amigo protector, y no yo solo un extracto de lo que soy.

 

Quedamos en silencio… un hueco en el estomago tan profundo  se me formo al tratar de respirar, mi espalda estaba fría, mi garganta seca, no pronuncie ni una sola palabra solo la mire a los ojos, esos ojos verdes… y nada…

 

Me voy… Dije

 

Me levante del suelo, mis ojos cerrados, mi respiración profunda, mi cuerpo estaba en calma… como si estuviera drogado o muerto, hasta que algo sujeto mi mano.

 

No te vayas… dice ella con una voz ahogada

 

Yo voltee y la observo, mirando directo a los ojos.

 

-¿que sientes por mi?

 

Ella permanece callada y mi corazón se acelera y cruje.

 

¿Qué sientes por mi Melisa?

 

Su mirada bajo y su cabello cubrió su cara.

 

Lo sabía… adiós.

 

Ella no mencionaba ni una sola palabra pero no soltaba mi mano.

 

Suéltame… Mel suéltame… no tengo nada más que hacer aquí…

 

Ella soltó mi mano, todos nuestros recuerdos de 2 años pasaron ante mí, desde las largas charlas filosóficas mientras la acompañaba a su casa, los múltiples y peculiares encuentros, tanto el del cementerio como el de la iglesia… tanto hablar de amor, tanta esperanza, fantasía, tantas charlas bajo el árbol… son solo patrañas hipócritas como ahogarse con aire, yo la amaba y no importaba que me odiara si pudiera quitarle un poco de dolor… pensando en  todo aquello camine con paso firme en mis botas, y no mire hacia atrás, aunque claro que quise hacerlo.

 

Nunca deje de verla por lo menos en mis sueños, y siempre después sabía algo de ella…

 

Ahora ese mismo silencio me evoca esas sensaciones, viejas heridas que nunca cicatrizan, encontramos  este lugar un oxxo abandonado, ahí melisa me vendo y atendió el brazo, entre nosotros se siente la tención como un auto a punto de chocar contra un muro, apenas pude mover el brazo decidí escribir un relato adjunto a un mapa y dejarlo en alguna parte de las ruinas de la ciudad.

 

Mi relación Con melisa esta en un punto muerto la necesidad no obligado a confiar ciegamente el uno del otro pero para eso… tenemos que limar asperezas… pero desafortunadamente no pudimos hacerlo, y dudo que lo hagamos… en nuestro afán de encontrar a otras personas descubrimos que  si se encontraban otros sobrevivientes, pero no los que pensábamos se trataba de una pandilla de malvivientes que luchan por recursos, se hacen llamar los “Elegidos”…

 

Entraron de la nada y saquearon el lugar o trataron… ya que Melisa y yo los corrimos a duras penas… temo que volverán, no… estoy seguro que lo harán y temo por la seguridad de ella, por eso nos hemos marchado… pero no te inquietes…

 

Nos veremos donde el corazón de un joven inicio y donde tiene que terminar… que el árbol de la vida te cuide viajero…

 Fin?