El cementerio, Relato basado en Dark Souls | Forum

Nota del editor: Historia BASADA en cierta sección del juego, muchas de estas cosas no pasan, pero si cuando las jugué o cuando escribía surgieron dentro de mi cabeza. de ante mano muchas gracias por leer.

Historia basado en el videojuego “Dark Souls”

Un aventurero llamado Roger en busca de tesoros habló con un campesino de muy malas pulgas el cual le dio información sobre una espada antigua que reposaba en lo más profundo de una cueva, Roger al tener su espíritu aventurero decidió ir hacia ella. Esta estaba a un par de kilómetros de la aldea, y nadie desde hace varios años había entrado. Antes de entrar Roger habló con las personas de la aldea sobre la cueva para saber si alguien sabían algo de ella, algo que quizás el campesino no le había dicho, pero recibió información nula y sin evidencia, muchos le dijeron que hubo un guerrero que hace mucho se adentró en ella, pero no para sacar una espada sino para enfrentarse a un ser oscuro encerrado dentro de ella. Un demonio que hace eones fue un dios creador del mundo pero que la corrupción lo consumió y ahora solo era guardián de una luz que ya nadie sabía para que era. Simplemente era una leyenda local que la cual a Roger no le interesaba. La verdad cierto sentimiento codicioso de poder hacia que nuestro héroe solo quisiera la espada y nada más.

Al adentrarse a la cueva Roger se tuvo que enfrentar a unos espíritus que explotaban en una onda expansiva, además de unos esqueletos que al desmoronarlos, estos se volvían a reconstruir pero luego descubrió que al encargarse de ciertos nigromantes los esqueletos de ciertas zonas morían definitivamente.

Roger en la cueva descubrió ciertas fogatas aun con fuego en sus cenizas lo cual lo hizo recordar que hace mucho escucho de unos borrachos en una cantina los cuales encontraron una fogata que nunca se apagaba, en esa misma conversación se metió un tipo el cual no estaba borracho y dijo:

“Son las hogueras del señor del fuego” – dijo con misterio dejando su paga para luego nunca aparecer.

Estas fogatas tenían una espada incrustada dentro de la ceniza, la cual no se podía sacar, Roger intento muchas veces sacarlas pero simplemente no podía, además intentar remover las cenizas era imposible ya que el acercarse a ellas su calor era tan intenso que hacía que Roger se alejara de inmediato. Pero extrañamente el estar simplemente cerca de la fogata hacia que uno pudiera disfrutar de su calor y descansar. Roger después de unos días siguió adentrándose a la cueva en busca de la espada pero no la podía encontrar, y algo peor sucedía: no podía volver sobre sus pasos. La cueva era demasiado enredada y no había puntos que Roger pudiera identificar para saber si podía volver o no, a lo cual solo le quedaba avanzar.

En un momento Roger encontró un desfiladero, el cual tenía una luz inexplicamente azul y que provenía de algún lugar, por más que nuestro héroe investigo no encontró explicación. Roger bajo y encontró unos seres amorfos pero algo familiares: eran unos esqueletos amarrados a unas ruedas, los cuales bajaban por el desfiladero y atropellaban todo a su paso, incluso a ellos mismos pero Roger encontró el momento perfecto para atacar, el cual era cuando llegaban al final del desfiladero, puesto que frenaban y la velocidad que ocupaban para volver a atacarlo hacia arriba era menor, por lo cual Roger aprovecho esta vulnerabilidad, pero esto no le sirvió de mucho puesto que eran demasiados. En un momento bajando por el desfiladero encontró una entrada hacia una cueva, por lo peligroso de sus enemigos se arriesgó al entrar, pero al adentrarse se encontró con una bola de piedra viniendo hacia él, Roger reacciono a correr hacia el otro lado, pero unos metros adelante cayó por un agujero que no había visto. Mientras se incorporaba sintió unos pasos que venían hacia él, miro hacia adelante y veía que un esqueleto distinto puesto que era más grande y gordo, este miro a nuestro héroe aun aturdido por la caída, luego giro hacia su izquierda y le dijo a Roger:

“vete de aquí” – mientras rompía la pared para hacer un agujero que daba con la continuación del desfiladero.

Roger se levantó miro su inventario y camino hacia adelante en donde al final del pasillo encontró al esqueleto gordo trabajando en herrería, Roger le hablo pero en primera instancia el esqueleto no dijo nada, el héroe lo volvió a intentar y esta vez el esqueleto dijo:

“vete de aquí te dije, solo quiero trabajar en buenas armas” – dijo refunfuñando por la presencia de Roger. – “no estoy aquí para hacer amigos, solo para hacer que las armas que se me entreguen contengan ciertas propiedades especiales, como que expulsen fuego o rayos desde su interior, la verdad es que es un arte muy exclusivo”

Roger pregunto qué si acaso no se necesitaba alguna ascua especial para eso.

“Si… hace muchos años, aunque la verdad no sé si fueron años, un guerrero me la trajo e hice que un par de armas estuvieran imbuidas en poderes para él, el me pagaba con las almas que recaudaba y bueno… no sé si le habrán servido puesto que no lo volví a ver…” – y comenzó a reír de forma grotesca y temible.

Roger le entrego su arma para que estuviera imbuida en fuego, el esqueleto gordo que nunca le dijo su nombre a Roger, termino el arma y el esqueleto absorbió cierto poder del héroe diciendo “mi paga”.

Roger luego comprendió que el esqueleto absorbió las almas que él le había robado y absorbido a las criaturas derrotadas por el mismo, había una vieja historia que decía que un guerrero al matar a una criatura viva en este mundo absorbía su alma y las almas que había matado esa criatura, como si fuera el ciclo de la vida para desde una perspectiva sombría y codicia.

Después de tener la espada lista Roger salió de la cueva hacia el desfiladero, justo saliendo el esqueleto gordo dijo:

“Olvídate de esos idiotas que bajan por el desfiladero, no llegan hasta este punto” – Roger pensó que quizás era por él, hasta que el esqueleto gordo dijo – “les da miedo nito y su cementerio, y tú también deberías temerle…” – reía el esqueleto mientras Roger salía y decidía seguir bajando por el desfiladero.

Mientras bajaba encontró cierta estructura recta enorme con cuatro paredes y un techo entre abierto pero el cual era bastante grande en donde fácilmente podía albergar más 50 personas dentro, ver esto lo sorprendió ya que Roger pensaba que estaba varios metros bajo tierra y la única explicación era quizás una vieja civilización, Roger tomo altura y termino descubriendo que la estructura recta era nada más y nada menos que un ataúd, Roger resoplo y pensó que era imposible, se metió dentro de la estructura y descubrió una biblioteca con libros de una escritura imposible de leer ya que era un idioma que probablemente estaba muerto, el piso estaba mojado, y en medio de la habitación había un objeto blanco, Roger se acercó y descubrió una máscara que sonreía. Roger solo pudo pensar “¿cuál es este mundo en el cual vivo?”.

Más adelante y varias estructuras después Roger encontró otra criatura nueva: un esqueleto del porte de las estructuras encontradas anteriormente, a lo cual Roger solo se sorprendió y reacciono a escapar adentrándose más aun a la cueva y mientras corría daba ciertos golpes a los tobillos de los gigantes hasta llegar a una zona abierta, llego al borde del precipicio lo cual no lo dejo avanzar más, miro hacia atrás y se percató que nadie lo venía siguiendo, descanso su brazo que llevaba la espada y admiro la vista, la cual era hermosa y aterradora a la vez.

En la parte que Roger pensaba que era el suelo había una niebla espesa y de ella surgían pilares de tierra que Roger calculo eran más o menos 200 metros de altura que mantenían un techo de tierra y todo iluminado como si fuera de día pero de nuevo inexplicablemente existía una luz que iluminaba todo, lo aterrador era que esta escena se expandía hasta donde se podía ver, no existía horizonte, era lo único que había, fácilmente Roger pensó “fin del camino”. Pero no era así, más adelante había otra cueva, y Roger solo se resignó a entrar ahí, para encontrar más esqueletos y nigromantes haciéndole la pesadillas más cargada aun, en cierto momento más dentro de la cueva Roger cayó por un precipicio para caer en una habitación tipo cueva donde en el suelo había agua y esqueletos inanimados. En este punto Roger exploto de ira y grito “¡cuando acabara esta maldita mierda!”.

“Bueno… ahora se acabara” – escucho Roger una voz siniestra, como si fuera de un sepulturero de un cementerio sombrío y muerto.

Miro hacia al final de la habitación para encontrar un ataúd apoyado en una pared, surgió una criatura la cual solo se puede describir como una masa de esqueletos flotante que poseía ropas negras, pero se veían mas como espíritus oscuros, pero había un esqueleto en particular dentro de la masa que era más grande y brillante, de la masa salieron dos manos y se abalanzaron hacia afuera.

Roger se incorporó, y solo pregunto que quien era este ser abominable, la criatura dijo:

“Soy nito y las cuevas que has explorado durante semanas es mi cementerio, es mi reino”.

“no te acerques a nito” – Roger recordó el consejo del esqueleto gordo.

Roger explico a lo que iba a la cueva, y pregunto si él era el demonio corrupto que era uno de los creadores del mundo.

“mi espada, ¿eh?” – dijo acariciando una afilada guadaña que saco de entre sus ropas – “sí, soy uno de ellos, pero no estoy corrupto como ves, nunca lo estuve, veras cuando este mundo fue creado yo me encargue de la muerte, quien moría y quien no. Y bueno al ser el que ordenaba algo tan importante era imposible que pudiera ser corrompido por la maldición la cual hacia mi trabajo, ya que despojaba de alma a un ser y lo dejaba deambulando por el mundo en busca de su alma, o quizás convertido en un hueco” – explicaba mientras deambulaba en busca de Roger.

Mientras nuestro héroe se escondía, escuchaba lo que le decía el rey del cementerio, pero Roger no entendía nada.

“Pero bueno, los humanos nunca lograron despojar a la humanidad de la maldición, y supongo que han pasado eones desde que Gwynn fue consumido por su propia llama, asique supongo que nada hará renacer a este mundo” – decía con cierta nostalgia por un pasado inentendible para Roger.

Nuestro héroe salió de su escondite y pregunto qué haría con él.

Nito agarro del cuello a Roger y con su guadaña extrajo su alma para luego matarlo, tiro su cuerpo junto a los demás esqueletos que yacían ahí, y volvió a meterse dentro de su ataúd y mientras lo cerraba sintió que alguien volvía a entrar al reino del cementerio a lo cual Nito comenzó a reír con su voz muerta y escalofriante.