¿Qué onda, banda? En esta ocasión toca una confesión que a la vez es una explicación… y buen pretexto para un artículo: por qué demonios no he terminado Starcraft II.

Para un fan de Starcraft como su servilleta, el haberlo comprado unos tres días después de su lanzamiento y hasta la fecha sólo haber pasado cinco misiones, es inaceptable. Debería arder en la hoguera por mi herejía… En fin… Realmente, sí llama la atención que hasta el momento no haya terminado el juego; ni siquiera lo he jugado en línea. Y estamos hablando de alguien que terminó las campañas del Starcraft y Brood War al menos unas seis veces y que podía pasársela horas aplastado en una silla incomodísima, jugando y jugando hasta que la máquina se apagara solita por sobrecalentamiento. Es lógico pensar que alguien así ya habría acabado el juego a estas alturas del partido por lo menos una vez y ya se habría echado varias partidas en línea.

Entonces, ¿qué me pasa? ¿De repente me vino una apoplejía? ¿Un paro cardiaco debido a los cúmulos de grasa que he reunido como buen gordo que soy? Sería entendible… Pero la excusa en realidad no es tan sencilla y no sólo es una. La primera es, como suele ser frecuentemente, el trabajo y el poco tiempo que me deja para hacer lo que se me antoja. Realizar las video-reseñas también ocupa parte de mi tiempo, así como este tipo de escritos; y aunque hacer esto me gusta, presenta el mismo problema que mi trabajo.

“¡Pero, Rafa!”, dirán ustedes, “¡Muchos de nosotros también tenemos obligaciones y ya estamos al nivel de los coreanos en Starcraft II! ¡Ésa no es excusa!” Bueno… pues necesito rellenar el artículo de una forma u otra, así que ahí les va…

Quizá la primera razón que les voy a dar les va a parecer muy pusilánime, pero pues yo estoy escribiendo esto, así que se joroban. Una de las cosas que me llamaba la atención del primer Starcraft era la forma en la que la historia te hacía sentir parte de ella. Con esto no quiero decir que la trama de la secuela sea mala… Hasta el momento me está pareciendo buena. Pero antes, TÚ eras el Magistrado o el comandante; TÚ eras un Cerebrado y luego, TÚ eras un… ¿Ejecutor? Sí, era eso. Tú eras quien mandaba a las tropas a su muerte y eras acá el súper carnal del Jim Raynor, el cuate del Fénix y la masa asquerosa favorita del Overmind.

¿Y ahora? No eres nadie. Eres un mero espectador. Y eso se siente piterón… Que los juegos te tomen en cuenta siempre es un detalle coquetón que te mete más en la historia y la hace más disfrutable.

«Entonces le dije, ‘Doctora, Boobs or GTFO.’ Me dijo que lo pensaría.»


Pero bueno, dejando esto de lado (y quizá con toda la razón, porque es un motivo que en realidad no justifica la hueva), otra razón por la que no me he animado a jugar tanto este título es porque la emoción se me bajó. ¿A qué me refiero? Dejen les cuento…

Era una mañana de sábado del 2007 y yo estaba bien jetón, ya que me había desvelado haciendo tarea de para la universidad… Ni modo, a veces pasa. Obviamente quería dormir hasta las cuatro de la tarde. Pero entonces, sonó el teléfono. Mentando madres, fui a contestarlo. Era Adrián. “¡No mames, Rafa! ¡Te tengo una muy buena noticia!” Por el entusiasmo con que lo dijo, uno pensaría que se había ganado la lotería. Pero no… Era algo mejor. “¡¡ANUNCIARON EL STARCRAFT 2!!” “¡¿TE CAE?!” Creo que en ese momento, mi cerebro explotó. Inmediatamente me metí a la página de Blizzard y casi lloré de emoción al ver el trailer. “Hell… it’s about time.” ¡A huevo que sí! ¡Sólo tuve que esperar 9 años! En aquel entonces, decían que iba a salir a finales del 2008. Apenas podía esperar, pero era un periodo de tiempo bastante razonable y por lo que se veía en el video del demo, iba a romper madres.

Poco después, Blizzard desmintió la fecha de salida, anunciando que ésta sería a mediados del año… Y posteriormente, se retractaron otra vez, retrasándolo a finales de año. Poco a poco, la emoción fue disminuyendo. Quizá hubo alguno entre ustedes que se quedó con las ansias al máximo, pero yo, al ver el lanzamiento de Starcraft II más lejano cada vez, me empecé a olvidar de él. Incluso llegó el momento en el cual comencé a cambiar las palabras “cuando lo lancen” por estas otras: “si es que lo lanzan”.

Pero a fin de cuentas, llegó julio de este año y el día 27, Starcraft II salió. Me costó un poco de trabajo creérmelo, pero a fin de cuentas, terminé comprándomelo… a sabiendas de la situación que más me ha descorazonado para jugarlo consistentemente.

Voy a ser muy honesto con ustedes. Yo APESTO en los juegos de estrategia. Soy pésimo. Pero aun así me gusta jugarlos – más cuando el juego me va llevando de la mano para que poco a poco le vaya agarrando la onda. Y esto lo hacía el primer Starcraft en su campaña, ya que conforme ibas desbloqueando nuevas misiones, te iba introduciendo a nuevas unidades para que las fueras aprendiendo a controlar. El nuevo también hace esto… pero sólo con la raza de los Terran. A mí me fascina usar a los Zerg y tanto su campaña como la de los Protoss… bien, gracias por preguntar.

La historia me intriga, pero es algo que puedo dejar pasar. El meollo del asunto es que yo no he jugado Starcraft hace mucho tiempo y cada vez que lo retomo me gusta echarme la campaña para volver a agarrarle el pedo. Siendo este un juego nuevo – y con muchas adiciones y cambios a unidades – me va a costar más trabajo volver a acostumbrarme, sobretodo porque los Zerg son menos ortodoxos que los Terran. Pensé que, tratándose sin duda de una expansión, el nuevo episodio de los Zerg estaría listo para que lo jugara en cuestión de meses… Pero no: los que ya hayan escuchado el segundo episodio del podcast y los seguidores de las noticias de Blizzard sabrán que no habrá dicho episodio sino hasta el 2012. Quizás.

Así pues, lo que me lleva a decir…

Querido Blizzard: pito.


Más les vale que la nueva expansión traiga un chingo de novedades, porque tanto tiempo para sólo meter un nuevo capítulo se me hace una pinche tomada te pelo, especialmente considerando que estamos a 3 años que lo anunciaron… ¡¡PITO, CABRONES!! ¡¡El Brood War – que contenía capítulos para las 3 razas – sí salió 8 meses después que el Starcraft original!! ¡¿QUÉ CARAJOS PASÓ?! ¿Saben cuál es mi diagnóstico? ¡¡ENCEFALOESCREMENTOSIS!!

Encefaloescrementosis: una enfermedad cada vez más común.


…Bah, qué me hago pendejo. De todas maneras me lo voy a comprar.

En fin, Blizzard realmente tiene juegos de muy buena calidad. Es la compañía que produce el cyber-crack más fino y adictivo. Lamentablemente, tiende a tomar decisiones con la cual no todos quedamos conformes y con gente menos adicta que yo, termina perdiendo seguidores. Sea como sea, no puedo negar que lo poco que he jugado de Starcraft II es bastante divertido y tiene el potencial de hacerme adicto muyrápido. Sólo tendré que ver qué pedo con las otras razas por mi cuenta…

Ya sé que me quejo mucho, pero, ¿ustedes qué opinan? ¿Hay por ahí algún fan del primer Starcraft que se sienta de modo similar? ¿O les valió madres todo esto y ya se les pueden poner al pedo a los coreanos?