Yo les pregunté de qué género querían esta reseña de no-cartelera. ¿Y qué eligieron?

Sí, hubo un tiempo, en una época lejana, en que los fantasmas blancos de cabellos telaraña no estaban choteados, y que el público occidental podía morirse de miedo viendo a niñas siniestras salir de televisores. A inicios de la década pasada el J-Horror llegó a sacudir un género del que siempre se dice que está muriendo (pero ahí sigue), y golpeó tan duro que parece que todavía no nos reponemos de aquello.

juon2Y no lo digo necesariamente en el buen sentido.

Pero, dejando de lado la sobre-apropiación hollywoodense y la sobre-exposición japonesa, es un hecho de que la retórica del terror contemporáneo japonés tenía mucho que ofrecer, y en sus mejores expresiones fue un giro refrescante al tipo de horror que ya conocíamos. Entre los primeros nombres que comenzaron a sonarnos conocidos estaba sin duda el de Hideo Nakata, director de la versión original de «El aro», y también el de Takashi Shimizu. Quien no sólo conquistó que una modesta película en formato video grabado en 9 días se volviera todo un fenómeno en Japón, sino que llegó a grabar personalmente sus remakes estadounidenses. A día de hoy seis películas japonesas conforman la serie completa de «Ju-on», con una séptima a estrenarse este año. Ello más las tres versiones estadounidenses de la misma trama. Porque nunca se tienen suficientes niños fantasmales-diabólicos.

juon3¡Nuuuuuunca!

«Ju-on» nace de una maldición. Concretamente de una maldición que recae sobre el sitio que ha sucedido un hecho funesto. El sitio queda maldito y todo aquel que se relacione con él de cualquier manera quedará atrapado dentro de la maldición, esparciéndola a su vez. Si bien no es algo extraño a ninguna cultura que los lugares donde pasan cosas terribles quedan marcados, esta visión japonesa da un sentido tan arbitrario como visceral a esta maldición. Los mundos que proponen las diversas películas de «Ju-on» son escenarios asfixiantes donde uno queda atrapado y de donde es imposible escapar. La propia existencia de continuaciones infinitas de películas enfatiza esta condición: lo que es un primer asesinato eventualmente alcanzará a tantos personajes de manera indirecta, que ya poco tendrán que ver con el hecho que dio origen a todo. Así funciona la ira, el odio o la desesperación al que se ven condenados aquellos que perdieron la vida.

juon4Y nosotros, con un poco de suerte, estaremos condenados a perder el sueño.

Esta «Ju-on 2», del 2003, que en realidad es la cuarta película de la serie, aprovecha la construcción fantástica que se ha venido estableciendo desde la primera pieza pero sin concentrarse casi de manera exclusiva en este hecho, sino en sus consecuencias. Funciona incluso si uno la ve como película aislada. Una en la que no resulta difícil darse cuenta que algo terrible ha pasado y que a partir de ello se va desarrollando el horror, pero que no se detiene a explicar puntualmente ese pasado. Porque a veces no es necesario saber.

juon5Una mujer viaja en el coche con su prometido cuando la radio empieza a sonar extraño. Otra mujer trata de ensayar sus líneas para un programa cuando empieza a escuchar golpes en la pared, una pared que no da hacia ninguna parte. Una estilista no puede concentrarse en su trabajo debido a la siniestra mancha que hay en el suelo. Un productor comienza a notar cómo todas las personas que trabajaron con él en un rodaje han comenzado a sufrir toda clase de desafortunados accidentes. Una chica trabaja de extra en una película de terror, pero comienza a notar algo extraño alrededor de la protagonista. Idas y vueltas sobre un tiempo inestable, secuencias que inician o terminan sin un orden. Todo gira alrededor de la casa donde se grabó un episodio para un programa paranormal. Una casa donde años atrás se cometió un asesinato.

Al igual que las películas anteriores, ésta se compone por una serie de episodios que se encuentran y se completan entre ellos, concentrándose más en los momentos de terror que en la cronología. De alguna manera este tiempo extraño enfatiza la figura del fantasma, y su maldición, un ente atemporal con una misión caótica cuya única finalidad es esparcir el dolor.

juon6La película aprovecha todos los elementos que hicieron famoso al terror japonés en su momento. Un terror pausado, bastante lento, secuencias sutiles seguidas por criaturas de la nueva mitología japonesa. Guiños en la esquina de la imagen, sonidos perturbadores, una suerte de sinsentido que parece regir toda la trama. Y, claro, un niño fantasmal que se hizo famoso por aparecerse en los momentos menos esperados, mujeres fantasmas contorsionistas saliendo de cualquier lugar, y pelucas diabólicas. Elementos que en muchos casos han llegado a ser ridículos en su sobre-explotación actual pero que vistos en retrospectiva resulta un poco innegable que algo tenía de macabro ver a una peluca arrastrarse en el suelo. Hacia ti.

juon7Digan lo que quieran pero yo ahí me moría.
(Bajo el supuesto de que hubiera llegado viva hasta ese momento)

Es posible que a diferencia de otras películas del mismo boom no haya envejecido especialmente bien (lo pienso en comparación de algunas cintas de Kiyoshi Kurosawa), pero mantiene a la perfección el espíritu independiente (y barato) que ha permitido que la industria cinematográfica japonesa crezca en muchos géneros. Y el terror se presta bastante para ello, porque demuestra que en muchas ocasiones no hace falta más que una buena idea, y uno puede pasar por alto la sangre de utilería y las pelucas malditas.

juon8Y luego vienen las grandes películas sobre pelucas malditas.
(Ok, ok, extensiones de cabello malditas)

Como suele suceder mucho con el género del terror, uno debe saber qué tipo de historias le funcionan. Lo que para alguien puede rayar en lo ridículo, para otro representará muchas noches sin dormir. Y ya sabrán si se asoman a la casa de los Saeki.

juon9¡Han leído esta reseña y ahora la maldición está con ustedeeees!

«Ju-on 2» (o «La maldición 2» o «El grito 2») es una película japonesa del 2003. Dirigida por Takashi Shimizu («Marebito», «Shock labyrinth», «An encyclopedia of unconventional women») y protagonizada por Noriko Sakai («Premonition», «Free and easy»), Chiharu Niiyama («Godzilla, Mothra and King Ghidorah»), Emi Yamamoto («Platonic sex»), Shingo Katsurayama («Murder of the Inugami clan»), Yui Ichikawa («Zebraman», «Forbidden siren», «The black swindler»), Takako Fuji («Rinne», «La princesa Mononoke», «The iDol») y Yuya Ozeki. Tiene 6.3 estrellitas en imdb, 5.3 en filmaffinity y 65% en el tomatometro de la audiencia. Puede resultar un poco complicado conseguirla, sobre todo tomando en cuenta que hay otras dos películas llamadas «The Grudge 2», pero no olviden que es la del 2003.