Si uno piensa en Grant Morrison relacionándolo inmediatamente con «Arkham Asylum» (ese monumental cómic), puede resultar un poco extraño encontrar su nombre en la portada de un cómic que muestra un cartel de un perro perdido. A sabiendas que dentro encontraremos más animales perdidos, con el discreto giro de tuercas de que ahora son máquinas diseñadas para matar.

we3 2Cosa de todos los días en Vertigo Comics.

Y de golpe nos vemos inmersos en una trama en que la tecnología armamentista ha evolucionado tanto como para poder hacer de un animal de compañía un soldado en potencia. Con todas las ventajas letales pero sin el molesto componente moral: puro instinto y un enorme armazón mortífero. Pero ha incluso avanzado tanto que esta posibilidad de un mundo donde un conejo puede ser un perfecto asesino ya no es novedad y los altos ejecutivos consideran que, como buen villano de ciencia ficción, el proyecto puede desecharse y enfocarse en uno nuevo. ¿Quién necesita más gatos malhumorados que se quejan de sus jefes?

we3 3Obvio todos necesitamos gatos gruñones (no necesariamente mortales) en nuestras vidas.

Así que antes de que podamos contemplar las implicaciones de este futuro ¿distópico? ya tenemos a 1, 2 y 3 escapando de un final como piezas de reciclaje. Todo esto sin perder de vista que, a diferencia de las historias con robots que temen por sus fechas de caducidad, aquí son encontramos con animales, que si bien pueden hablar y pueden pelear increíblemente bien, no son capaces de interpretar todo lo que sucede a su alrededor y actúan guiándose finalmente por sus instintos. Sus correspondientes y caseros instintos.

we3 4Cosas que todos sospechamos sobre los animales de compañía.

Frank Quitely, también ilustrador de «The Authority», describe el estilo de «We3» como un ‘manga occidental’. Y es que ciertamente su ritmo, su enfoque mucho más centrado en el desarrollo visual de la acción, y sus limitados diálogos, hacen que la lectura de por sí breve de la historia (que tiene poco menos de 100 páginas en sus tres números), se pase de manera vertiginosa siguiendo esa delirante y violenta persecución protagonizada por tres animales. Quienes, de algún modo, logran equilibrar su presencia narrativa entre su estereotipo cotidiano (no tienen ninguna particularidad en sí mismos, encarnando la idea de mascotas típicas de cualquier hogar) y su capacidad de expresarse. De manera accidentada y fragmentaria, pero sin duda reflejando de manera apropiada lo que suponemos sería el flujo de conciencia de los animales (animales forzados repentinamente a ser armas mortales, no olvidemos eso).

we3 5¿No son adorables? Ahora quiero mis propias mascotas-armas-mortales.

La más que curiosa combinación de estos elementos funciona a la perfección en una pequeña serie que sin duda no busca más que colgarse de algunos puntos contundentes de su propuesta y presentarse casi a modo de divertimento. Cuestiones sobre la naturaleza animal, un par de tópicos de la ciencia ficción, mucha violencia y un poco de ternura inevitable (por diox, hay un conejo con una armadura moradita) hacen de «We3» un cómic tan atípico como fácilmente relacionable con Vertigo.

Y como tal parece que no hay cómics, por corto y simple que pueda hacer, al que Hollywood no le ponga las garras encima (y ya quiero ver qué hacen con tres animales robóticos si no pueden hacerlos clasificación R), desde el 2006 (dos años después de su publicación) que buscan adaptar la historia a cine, sin que los proyectos lleguen a ninguna parte incluso en los casos en que ya contaban con un guión (seguramente compuesto en gran medida por esos fantásticos y complejos diálogos). Lo único que podría darnos un poco de esperanza es que este año, en un Q&A con James Gunn en el que le preguntaron qué cómic le gustaría adaptar ahora, dijo que «We3». Y si ya vimos lo que fue capaz de hacer con sanguijuelas extraterrestres asesinos y mapaches extraterrestres con metralletas, sólo hay que pensar en las posibilidades.

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Pueden comprar «We3» en inglés en Amazon (incluyendo una versión kindle) y en formato digital también en ComiXology. En español lo editó Planeta de Agostini en el 2005 y no parece que pueda conseguirse más; y Editorial Televisa en su línea Vertigo el año pasado, pero parece que tendrán que buscar esas ediciones en Mercado Libre o similares.