Después de meses de batallar por mantener su empresa a flote, hoy THQ informó que se acogió al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos.

Después de meses de batallar por mantener la empresa a flote, hoy THQ informó que se acogió al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos.

Este capítulo permite que una empresa reorganice sus deudas, en un momento de insolvencia. En este caso, dicha reorganización incluye la compra por parte de Clearlake Capital Group de los activos de THQ, por un monto 60 millones de dólares. Esta compra incluirá a todos los estudios de desarrollo: Vigil, Volition, THQ Wireless, y THQ Phoenix.

De acuerdo con un comunicado oficial en la página de THQ, las operaciones seguirán desarrollándose de manera casi normal, y ninguno de los títulos de próximo lanzamiento será cancelado (Metro: Last Light, South Park: The Stick of Thruth y Homefront II).

En una parte del comunicado, se dice que «La venta y la presentación [del capítulo 11] son pasos necesarios para completar la transformación de THQ y la posición de la compañía en el futuro, dado que seguimos confiando en nuestra cartera de juegos existentes, la fortaleza de nuestro estudio, y el talento que hay en THQ.»

«Estamos agradecidos con nuestro excelente equipo de empleados, socios y proveedores que han trabajado con nosotros a través de esta transición. Estamos encantados de haber atraído a un fuerte socio financiero a nuestro negocio, y esperamos completar la venta con rapidez, para hacer que el proceso sea lo más sencillo posible.»

Pues ahí lo tienen banda, en el lado positivo del asunto, no hay juegos cancelados, y Clearlake Capital Group planea mantener los contratos externos con otros estudios que tenía THQ.

Fuente: Kotaku